viernes, 28 de septiembre de 2012

La Suerte.

Es, quizás, el concepto más nocivo para la persona.

La suerte es un encadenamiento de sucesos considerados fortuitos o casuales, que pueden ser favorables o adversos, dependiendo del azar.

Es decir, es una probabilidad, el hecho de que te toque algo o no, y que esto sea bueno o malo.

Obviamente la suerte existe, pero es simplemente eso, una estadística, eres tú quien pone los parámetros, las variables.

¿Que te toque la quiniela es suerte? Depende. Depende de la apuesta que hagas, que puede tener más probabilidad de ganar o no. Una quiniela simple es más difícil que toque que una con siete triples y siete dobles. Obviamente la segunda es más cara, pero prácticamente te aseguras el éxito. La primera puede tocar, sí, pero hay que tener mucha Suerte. Pues la vida es exáctamente eso, una quiniela.

No existe la mala o la buena Suerte, tenemos que tener en cuenta que el azar existe, por tanto no siempre saldrán bien las cosas. La fortuna es una variable con la que convivimos.

Esa gente con "Mala Suerte" no es que sean desgraciados. Su problema es que se autosugestionan pensando que tienen "Mala Suerte". Por tanto, ¿para qué intentarlo? ¿Para qué esforzarse? ¿Para qué comprar un boleto para la lotería de la vida? No es que tengan mala suerte, simplemente es que no entran en la Ley de Probabilidades, no juegan. La Suerte es algo que se atrae, es algo a lo que se llama, que se provoca. Esa gente con "Buena Suerte" son personas proactivas, que se mueven mucho, que compran muchos boletos, que gantan mucho dinero (esfuerzo) en la quiniela (vida).

Confiar en La Suerte es darle el control de tu vida a un factor externo, además incontrolable, abstracto. Esperar a tener suerte es como intentar que te toque el bingo sin llevar cartón.

Sal a buscar a La Suerte, haz que la Ley de Probabilidades juegue a tu favor.

1 comentario:

  1. Los triunfadores tienen mucha suerte. Si no lo crees, pregúntale a un fracasado. MICHAEL LEVINE.

    ResponderEliminar